
Pese al frío y la lluvia, los aficionados se dejaron seducir por la promesa de un nuevo equipo que desde la cancha y con base en paredes y disparos a los postes lograron conquistar a una multitud que desde el inicio del duelo ante Toluca aprovecharon cualquier motivo para celebrar.
“Vamos, vamos América” retumbó en la acústica del recinto desde la cabecera donde se ubica la barra Munumental. El canto contagió al resto de los asistentes que no perdieron la oportunidad de cantar también.
Luego llegaron las fallas de Daniel Montenegro, Christian Benítez y Jesús Molina que arrancaban primero un “aaaah” de emoción y después aplausos por las opciones que sus jugadores provocaban.
La mayor parte de los asientos vacíos en el inmueble de la colonia Santa Ursula se ubicaron en las cabeceras y algunas esquinas cerca del terreno de juego. Fuera de estos espacios la gente lleno el estadio.
Sólo al principio del segundo tiempo un “dale, dale oh” proveniente de la porra visitante opacó por momentos el apoyo azulcrema.
De esta forma el jugador número 12 hizo su partido al grado que Alfredo Talavera y Antonio Naelson “Sinha” recibían un sonoro chiflido cada vez que jugaban la pelota. En especial el brasileño naturalizado que durante la semana declaró que Toluca era un equipo tan grande como las Águilas sólo que no tenían la misma mercadotecnia.
Fuente: Medio Tiempo
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